La meta, el camino o ambos.

“There is an opportunity cost for everything we do. This is why we must have the awareness to ensure that what we are pursuing is really what we value, because the pursuit leaves countless lost opportunities in its wake. We choose one experience at the sacrifice of all other experiences.”
 ― Chris Matakas, The Tao of Jiu Jitsu

Uno de los filmes que encajan perfectamente en la Doctrina Kundalini es "El Camino del Guerrero", en ella un maestro espiritual (muy al estilo de Shilbalam) lleva a un joven gimnasta por el camino de la evolución personal.

La película está llena de enseñanzas que llevan al espectador a meditar sobre la forma en que se conduce en la vida. Una de esas enseñanzas se encuentra en el fragmento que a continuación encontrarán y del que platicaremos más adelante.


Resumiendo, el Maestro promete al joven mostrarle algo fantástico y para ello lo lleva por un bosque para al final enseñarle algunas piedras del suelo. Cuando el estudiante reclama lo que él considera una tomada de pelo el maestro le recuerda lo feliz que fue durante el camino y con ello el aprendiz reconoce la enseñanza: aprender a disfrutar el camino, no solamente los resultados de éste.

Esta postura puede parecernos mediocre, porque considerar este fragmento de forma aislada nos llevaría a que no nos preocupemos por alcanzar nuestras metas porque a final de cuentas estamos disfrutando el camino, pero en realidad esto no es así. Los protagonistas tienen un propósito cada uno, el maestro quiere que el joven evolucione como persona y el joven busca retomar la excelencia deportiva. Para ambas metas disfrutar el camino es parte del proceso, no una enseñanza aislada.

Ahora hagamos un símil con Ka-boom!, no son pocas las veces en que Óscar le ha señalado algo como esto: “no importa que no alcancemos nuestras metas, porque lo bailado nadie nos lo quita”, y con ello se justifica la carencia de resultados dado que los miembros del estudio están trabajando en lo que les gusta y dónde les gusta; están, en otras palabras, disfrutando del camino.



El problema es que se han trazado metas solo como una referencia vaga, cuando algún K! exige el resultado del esfuerzo Óscar le entrega piedras y le señala ¿qué no han disfrutado el camino?, justo como en el video.


Si revisamos la película completa encontraremos al joven gimnasta realizando ejercicio físicos que tienen como objetivo retomar la condición atlética de un deportista de alto rendimiento, y eso forma parte del camino también. Y justo ello es lo que ha perdido Ka-boom!, han caminado sin sentido, desperdiciando años y recursos financieros en pequeños esfuerzos. Hoy por ejemplo, han decidido regresar a La Mole, encontrándose muy lejos de dónde estaban cuando la abandonaron, y afirmo esto porque la salud y la edad de los miembros se han deteriorado sin avanzar hacia conseguir lo que buscaban. Es como si el joven gimnasta saliendo de entrenar decidiera embriagarse en un bar.


Ahora, lo que he platicado aquí no aplica a todos, solo a Mariana, Horacio y quizá al mismo Óscar. Para los otros miembros el acceder a Ka-boom! es ya en sí su meta, no buscan nada adicional, haber sido aceptados en el estudio ya considera cumplido su objetivo de vida.

Por eso concluyo diciendo: Está bien disfrutar el camino, pero nunca dejando de lado lo que se busca.