Luke, Zacek, Óscar y The Last Jedi

Imaginen una historia acerca de un joven que es arrastrado a un conflicto bélico, el joven tiene una predisposición para aprender una fuerza mística de un maestro que se le presenta de forma fantasmal.

Además de las enseñanzas recibidas por su extraño tutor, el joven tiene que aprender también de otro maestro, un anciano sabio que vive como ermitaño en un planeta distante. Con este anciano, el joven guerrero aprende los caminos de una filosofía basada en desaprender lo aprendido y lidera a su grupo de amigos por batallas interestelares contra un poderoso enemigo que ha adquirido las mismas enseñanzas que él, pero llevándolas por el camino del mal. Ying yang. Lado oscuro y lado luminoso.

¿Les suena?, sí, seguro pensaron en Luke Skywalker pero, para su asombro, les cuento que Zacek tiene las mismas características del joven Jedi y por lo mismo podría pensarse que su creador vería con desagrado lo que sucedió en The Last Jedi con Skywalker pero parece ser que no fue así.


Cosa que, dados los antecedentes, extrañó a más de uno:


"¡Ay, condenado!, es que si te lo explico ya no es", debió haber pensado Óscar al leer este comentario, pero rapidamente se sacó una explicación poco convincente de porque a Zacek no le hubiera pasado lo mismo, aunque, como ya vimos, los dos personajes fueron creados con telepatía autoral.


Ya con las respuestas del post me empezaba a hacer una idea de por donde iba la cosa, pero en Katún media lo confirmaron. Con otras palabras a continuación encontramos porque a Óscar le gustó la película:

Piensen por un momento desde la mente de Óscar (solo no se queden ahí, porque el lado oscuro es fuerte en él): Óscar fue, a su juicio, un joven que intentó cambiar las cosas, se enfrentó a la mafia de la distribución y a los malvados editores (el imperio), instruyó un discipulo (Humberto Ramos) que fue seducido por el emperador del nuevo orden (Luis Gantús) hacia el lado oscuro, gracias a las malas influencias de éste "mató" la relación con sus padres (cósmicos) y se convirtió en el referente de la industria. 

Pero hay una nueva esperanza, una joven genio (Mariana) que tomará la pequeña rebelión (Ka-boom!) y sus libros místicos (El tintero mágico) para regresar la república (la industria del cómic) a un nuevo esplendor. Esta nueva aprendiz tendrá que resistir las tentaciones del lado Oscuro cuando el exaprendiz de Óscar le ofrezca dominar junto a él la industria del cómic (o tomar una taza de café).


Jajajaja, Dios mío santo, solo a Óscar, de verdad, solo a Óscar y a su ego enorme le pasan por la mente estas cosas.

Por eso, la próxima vez que alguien les diga "Luke está fuera de personaje" piensen en este post y díganle "tienes razón para que Luke pudiera acabar así tendría que ser Óscar".